Cuando estrenas el cerebro? - Parte I -
Eventualmente todo individuo
posee cerebro. No obstante, individuo pertenecería a un concepto alejado de la
realidad social, económica, política y filosófica. Ya que, por definición, el individuo pertenecería a una
categoría biológica más no humana propiamente dicho.
Lo social, lo económico, lo filosófico y lo político y su
preocupación nos acercaría aún más a la concepción de otro concepto: el de ser humano.
El cerebro se define como la parte superior y más
voluminosa del encéfalo, constituida por una masa de tejido nervioso y que se
ocupa de las funciones cognitivas y emotivas y del control de actividades
vitales como los movimientos, el sueño, el hambre, entre otras funciones. Por
tanto, el cerebro de un individuo y el cerebro de un ser humano son
diametralmente opuestos.
El cerebro de un individuo repite, posee una concepción
de la vida predeterminada y determinada, cree en deidades únicas e
irrepetibles, no crea, es mecánica, arrogante, no aprende, no busca la verdad,
cree que la vida es una y que no hay una vida más allá de esta, piensa que
después de la muerte alguien se hará cargo de él o ella, es pesimista,
no va más allá de lo que su percepción le permite y sencillamente no es
feliz. Y si lo es, vive junto a una felicidad artificial o creada por otro. Le
teme al futuro. Lo vive con angustia.
El cerebro de un ser humano piensa, posee una concepción
de la vida y la entiende como un espacio, como un momento, como un lapsus, como
un don, como un milagro, cree en deidades y respeta el abanico de supuestas
deidades dependiendo de espacios físicos, geográficos y culturales, crea a
destajo, su vida no es mecánica, es espontánea y fluida, cree en las sorpresas,
aprende todos los días, busca la verdad ( o un pedazo de ella), cree en otros
cielos, piensa en la libertad, y es sencillamente feliz. O por lo menos lo
intenta. Su vida no es artificial. Es un milagro, es una bendición. No le teme
al futuro. No lo vive con angustia. Lo lee como un desafío.
El individuo es un depredador. El ser humano redime, es
decir, rescata a los esclavos o cautivos mediante un precio. El precio tiene un
valor muy bajo. El precio es la conciencia.
El ser
humano rescata a los esclavos o cautivos mediante un precio. Es decir, insta a
pagar a través de la conciencia con a veces la búsqueda de la verdad. Que
a veces duele. Sin embargo, después del dolor nace la fe y la esperanza.
El ser
humano rescata a los esclavos o cautivos mediante un precio. Es decir, insta a
pagar a través de la conciencia y en ocasiones da como resultados la soledad.
El individuo
te coge de los pies y no te deja volar. El ser humano te coge y junto a ti
permite construir alas. Sin esperar nada cambio más que la vida misma.
La mayor
parte de las veces son los individuos los que en el lecho de su muerte se
arrepienten o desearían más tiempo para arreglar o realizar TODAS las
actividades que no pudo hacer.
La mayor
parte de las veces el ser humano en el lecho de su muerte da gracias y se
prepara para un nuevo desafío: el de dejar la Tierra en paz y buscar nuevos horizontes
que solo la muerte nos puede dar.
Depende
de ti. Aún estamos a tiempo. O somos individuos o nos convertimos en seres
humanos.
Entonces, ?estas listo para estrenar el cerebro?
Comentarios
Publicar un comentario