Arquetipo 2.4
El discurso político
debe tener bases. Las bases son los pilares ideativos. Los pilares ideativos se
relacionan con ética, moral, cultura, ciencia, religión (es), lógica, psicología,
teoría del conocimiento, entre otros ejercicios de las ideas. Lo anterior se
aprende en la escuela, instituto y la universidad. Posteriormente, con un
magíster y un doctorado. No olvidando que se aprende hasta que la vida cesa. De
forma natural y de forma formal.
Cualquier ser
humano no puede ser político. O dedicarse a la política. Un sinónimo de política
es arte. Arte es el efecto de una habilidad. Se puede nacer con cierta
habilidad y se tiene que pulir. Muchos nacemos con habilidades. No muchos la
pulen. No muchos saben y generan arte. No todos pueden ser lo que les dé la
gana. Sino que se puede ser lo que se estima potenciar como ser humano. Por ejemplo,
ayudar a alguien.
No es época de
pensar en iluminados. Los iluminados no existen. Ya que somos muchos. Todos pueden
ser iluminados de la mano de google.com y YouTube. El ser humano que se jacta
de pertenecer al orden de los iluminados recae en lo patológico. El iluminado patológico
es deficiente para una sociedad como la nuestra. Nuestra sociedad necesita
crear el puente entre tres y hasta cuatro generaciones al mismo tiempo. Los
iluminados no caben en esta secuencia. El iluminado no es uno. Son todos. La raza
ilumina.
El discurso político
ya está desgastado. El discurso político
ya bordea el deja- vu. El discurso político alardea de lo mejor de cualquier superhéroe
cinematográfico. El discurso político se desgasta. El ser humano ya no cree en
el discurso político. Y no cree y ha perdido la fe, ya que, quienes construyen política
no se preparan. No estudian. No se capacitan. Y cualquier ser humano en la
actualidad puede ser asesor, jefe, gerente, subsecretario, coordinadores,
viceministros, ministro y hasta presidente.
El discurso político
quedo inmóvil en una foto, en un Facebook, en un Instagram, en un twitter, el
discurso político quedo en un quehacer de forma sin fondo.
El discurso político
quedo inmóvil en el ego. En el tú. En él. Pero no en mí. El mí se perdió cuando
se comenzó a mentir. El mí se perdió cuando se dejó de tener sentido de
pertenencia con la política.
Ser político implica
conciencia. Y la conciencia tiene niveles. Niveles positivos y negativos. En niveles
positivos la conciencia genera unión. En niveles negativos la conciencia genera
separación.
No todos son
parte de su propia conciencia. No todos habitan ni siquiera en su propia
conciencia. Existen seres humanos que su conciencia solo habita en un folleto.
El discurso político
está desgastado. Por qué dejaron de estudiar. Dejaron de leer. Y leer,
estudiar, tener bases ideativas, sacar un título, pasar por la universidad, ser
bueno, pensar en la raza, proveer de un futuro provechoso para nosotros mismos.
El discurso político
está desgastado. Una razón entre muchas es que dejamos de ser creativos. Y la creatividad se construye en el conocer. En
el estudiar. En el investigar. En educarse.
El discurso político
está desgastado.
Y lograra
resurgir cuando no se olviden que la política debe responder al ser humano. A la
compleja fusión de lo biológico, lo social y lo psicológico.
Tu puedes
Comentarios
Publicar un comentario