Arquetipo 3.3 / El Niño / Parte 1

 


Un arquetipo es un modelo o patrón, universalmente reconocido que representa un tipo de personaje, símbolo, tema o situación que aparece de manera recurrente en niños, leyendas, historias, culturas y obras literarias a lo largo de la historia. La respuesta emocional ante un arquetipo es inmediata debido a su universalidad. El arquetipo es un patrón innato en el inconsciente colectivo de la humanidad. Se manifiestan en sueños, mitos, leyendas, religiones y en la literatura.

C. G. Jung.


 Tengo 9 años. Mi padre me abandono a mí, a mis hermanos y a mi madre cuando tenía 5 años. Él se fue de viaje. Aun no llega.  Tengo dos hermanos más. Un hombre y una mujer. Yo soy el menor.  Me llamo Imran. Mi madre me puso ese nombre. Mi madre se llama María. Mi papá José. Que espero vuelva algún día.

Mis hermanos trabajan también. Ellos bailan en las esquinas de los semáforos. Yo, digo poemas, palabras hermosas y de vez en cuando, a los automovilistas que lo requieren, les digo párrafos de grandes pasajes de la literatura universal.

Ese es mi trabajo. Digo cosas hermosas para que el corazón de quien escucha se emocione y siga latiendo. Por las mañanas voy a la escuela. Estoy en sexto año. Entro a mi escuela a las siete de la mañana. Salgo a las dos de la tarde. Antes de salir el portero siempre comparte su almuerzo. Don julio. Un gran hombre.

MI madre era costurera. Y obviamente, con lo que ganaba no podía comprarnos grandes cosas. Desde muy pequeño entendí que lo material no debe ser el objetivo primordial. Mi mama siempre me dice: “tu propósito es cambiar el corazón del hombre y cuando lo logres cambiaras la historia propia y de la humanidad. Mi madre siempre repetía eso.

Vivo en un país muy desigual. Aunque tengo nueve años soy muy consciente de muchas cosas. Tal vez, por el abandono de mi papá la vida me cambio. Cuando puedo ver televisión veo las noticias y entrevistas. Me encanta ver entrevistas. Pero, me llama la atención el bajo nivel de nuestros mandantes.  

Conozco gente que tiene mucho dinero pero no es inteligente. O tiene otro tipo de inteligencia que desconozco. Sin embargo, de lo que siempre se habla es de corrupción, robo, malversación de fondos, engaños y un largo etcétera. He llegado a pensar que quien tiene mucho dinero es un maestro del engaño, la corrupción y el robo por que no veo en esos ojos de rico un atisbo de alma bondadosa. Aunque no quiero generalizar, aun no me he topado con un hombre rico que sea integro. Al contrario, si me encuentro con mucha gente pobre y valiosísima. Como el portero que comparte su almuerzo conmigo.

Vivo en un barrio muy pobre. En la equina de mi cas venden marihuana, en la otra esquina venden cocaína y en la otra esquina unas damas muy bonitas ofrecen sus cuerpos a cambio de dinero. Tengo amigos de nueve años en el barrio que ya saben manejar armas y han robado. Algunos cuentan que han visto gente morir.

Pero yo soy diferente. O por lo menos lo intento. Quiero salir de ahí. Pero aun no puedo. Pero sé que lo lograre. Uno de los regalos de mi papá antes de que se fuera fue que constantemente me repetía: estudia, lee, transfórmate en un profesional de bien. Además, todos los días antes de partir de casa me decía al oído: “la mente es más rica que el oro, y el corazón más grande que cualquier fortuna”.

Extraño mucho a papá. A veces lloro solito. Me acurruco solito entre mis brazos para no llevar tristeza a casa ni a mi mamá ni a mis hermanos.

Sin embargo, cuando llego a mi trabajo todo se pasa. Olvido la tristeza y continúo. A veces, las personas me miran con indiferencia, otras veces con curiosidad. Me paro frente a los autos miro fijamente al conductor y grito: “Palabras hermosas, jarabe para el alma”.

Muchas veces los conductores abren su ventana y comienza mi tarea. Digo cosas sencillas, poco complicados, versos sencillos, pero profundos, que hablan de la vida, del amor, de la esperanza y por sobre todo, de los sueños.

Por ejemplo, el último que dije fue:

“bajo el sol brillante, mi alma canta,

Aunque mi barriga a veces aguanta,

Soy rico en versos y pobre en pan,

Pero nada me detiene porque tengo sueños,

Y nadie me los quitara”

La gente suele sonreír ante la sinceridad de mis palabras, algunos se conmueven, otros me dan monedas, muy raramente billetes. Y cuando esto ocurría, es decir, cuando un conductor reposaba sobre mis manos billetes les decía:

“gracias, buen amigo, por tu bondad,

Que el sol te ilumine con claridad.

Aunque mi vida no es de lujo ni de opulencia,

Mi poesía es mi única riqueza.”  

Pero no todo era fácil. En los semáforos, la vida es dura. El calor de la tarde golpea fuerte. A veces el ruido del tráfico molesta. Y lo que me preocupa muchas veces es que mis palabras lleguen a oídos correctos. Pero siempre la realidad se impone. Pero para eso estaba yo; para hacer retroceder a esa realidad violenta.

Al anochecer volvía a casa. Mi madre se preocupaba de tenernos un rico arroz con huevo. Y un poco de pan. Más agua o con suerte un jugo en sobre. Que simple pero que rica comida.

Antes de dormir y de despedirme de mi mamá y mis hermanos en mi cama repasaba todo lo ocurrido en el día. Dejaba los malos momentos del día en un sobre imaginario. Y en otro sobre imaginario guardaba las sonrisas.

Las sonrisas de las personas que habían escuchado mis palabras. Palabras y sonrisas que se transformaban en alimento de mis sueños.

Lo más importante: yo también sonreía antes de dormir. Pero más importante que eso; despertaba con otra sonrisa…





Comentarios

LO MAS VISTO

Hablemos un poco de Psicología: Manipulación vs Liderazgo. - Parte I-

El Enfermo / Parte I

GUERREROS CELESTES - Dedicada a los nadadores del mundo - Parte I -

El agradecimiento

Hablemos un poco de psicología - Parte III - ¿ Para que tanto Flow y maluma baby ?

Historias de ángeles. .Parte II. -Amanda-

Arquetipo. 2.1.

Arquetipo 2.8 - Mentira -

El espectro - Parte II -

Muchas Gracias