Del libro: Refranes, reflexiones y refritos. Chapter 8 “No hay mal que dure cien años, ni cuerpo que no resista” – Pamplinas. Si hay males que duran más de cien años y cuerpos que no resisten y no alcanzan a ver la paz, el desarrollo y la evolución.
![Imagen](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_EF2qLiahjkCjSoXf1IoK5n4qsnDC9f9IfAS48EX6x7fZ_pj15p7vBSFlpDxoVZaUqzVrPTaUE0OxtjPQTCYuZZyph0ylAcewDm6wxaRKqzmqhqLxxHLx7pqOVckkyeoZdakxLR8q8q7vFIimSkLhe4JFfmSm5MX8lpkBKTWe548aj78PJMjXIVNmSfU/w640-h480/100.jpg)
Este refrán popular lo escuchamos frecuentemente en los momentos de dificultades, y su mensaje explícito es que ningún mal dura para siempre, y además podemos resistirlos con temple. Lástima que sea una brutal mentira. Ya que, quien espera que el mundo cambie jamás se lograra el objetivo de la evolución. Mientras que si “tú” cambias podría existir un milagro. Si crees en ellos por supuesto. Ahora, para que un mal no dure cien años se necesitan de muchos factores. Los factores que influyen en el desarrollo de una civilización incluyen aspectos geográficos, el clima, el sedentarismo, la domesticación de animales y sus respectivos cuidados, la religión, el desarrollo de la agricultura y la ganadería, la eficiente administración del excedente económico, y la ideología que sustenta el poder de los gobernantes. Sin embargo, y según muchos textos sobre estudios del hombre a lo largo de la historia humana se ha demostrado que la duración de una civilización y su evolución es un tema ...