Arquetipo 2.9 - OMITIR -
La maldad no es cuestión de violencia necesariamente,
sino que también de omisión. La omisión puede ser entendida como violencia. Sino
que es sutil, etérea, casi imperceptible. La omisión es maldad pura, ya que,
niega la existencia de otro ser humano.
Abandonar es omisión. Dejar el teléfono abierto es omisión.
Intentar escalar a lo más alto no importando el costo es omisión.
Cuando el fin justifica los medios se habla de omisión. Pero
la omisión nos lleva a otro lugar. Al lugar de la enfermedad. Quien omite no es
empático. Ser empático es colocarse en el lugar del otro. Quien no se coloca en
el lugar del otro no es empático. No ser empático es el principio de la locura.
La locura es la enfermedad de este tiempo. La omisión cobija
a través del silencio lo que no se dice. Dejar a la deriva socialmente hablando
a otro es omisión. Dejar sufrir o sufriendo a alguien es omisión.
¿A qué viniste a la Tierra? A justificar todos los medios
para conseguir una meta. ¿Viniste a gastar oxigeno? ¿a Gastar recursos
naturales?
¿Viniste a la Tierra por una casa, un auto y bienes materiales?
Si viniste a esto estas omitiendo. Si omites estas bordando la locura.
A la Tierra se viene a amar y ser amado. En todas sus
formas, figuras, pesos y tiempos.
A la Tierra se viene a disfrutar del camino mas no del
destino. Quien disfruta el destino está acabado, rígido, encarcelado… muerto.
No existen leyes acerca de cómo encontrar la felicidad. Pero
si existen leyes para sancionar.
Sancionar es omitir. Sancionar es coartar una respuesta. Nadie
nace malo. Todos somos buenos. Nadie nace malo. Solo posee ignorancia y ansias
de poder y poderes artificiales que según quien lo dictamina lo acercara a la
felicidad, al orgullo, a la completitud.
La felicidad e otra cosa. Y está mucho más cerca de lo
que crees.
Despierta.
Grita
Bota.
Despierta.
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