Cuentos cortos de Terror - X- Blackout – Parte II.

A cualquier hora. En cualquier lugar.

-          ¿Quiénes son Ustedes?

-          Somos lo que somos. Diferentes pero muy parecidos. Hijos del mismo techo. Creados para una misma misión. Compartimos el mismo Dios. Solo que ustedes lo dibujan de otra forma. Pero en esencia es el mismo.

-          ¿Qué harán conmigo? ¿experimentos?

-          No. Nunca. Al contrario. Estas acá por una razón extremadamente importante. Nos tienes que ayudar.

-          ¿Cómo?

-          Lo primero es aliviarte y sanarte de ciertas enfermedades. Eso estamos haciendo contigo ahora. Posteriormente, te tenemos que mostrar el vecindario.

-          ¿el vecindario?

-          Sí, todo lo que te rodea. La vía láctea.

-          ¿Hay algo más allá de la vía láctea?

-          Así es.

-          ¿Qué hay?

-          No puedo decirte. Tienes que descubrirlo. Y por último, tendrás que tomar una gran decisión.

-          ¿Decisión? ¿sobre qué?

-          Todo a su tiempo. Todo a su tiempo.

Me puse de pie. No estaba solo. Había diez y siete seres igual a mi interlocutor. Eran muy amables. El lugar donde estaba era extraño. Alrededor de nosotros era como gelatinoso, cambiaba de colores constantemente y cuando caminabas se podía ver el espacio. O algo parecido a eso porque se veían como estrellas eternas que brillaban debajo de nosotros.

-          ¿Dónde estoy?

-          Muy cerca de casa.

-          ¿De Tierra?

-          Si. De Tierra.

-          ¿Dónde específicamente?

-          A unos mil quinientos kilómetros de Tierra.

Nos detuvimos en una especie de gran ventana. Se podía mirar lo profundo, espacioso e infinito del espacio.

Mis nuevos amigos se tomaron de las manos e hicieron un circulo. Mi amigo que me dio la bienvenida estaba a mi lado. Su mano estaba fría como un congelador. Solo me miro. No movió su boca. Al parecer tenía otra forma de comunicarse. Pero sentí en mi interior que me decía: tranquilo. Todo va a estar bien. Confía en mí. Confía en nosotros.

No tenía otra opción. Donde arrancaría de querer hacerlo. Todos miraron hacia arriba a una especie de techo y sorpresivamente me sentí levitar. Un circulo se formó solo para mí. Ese círculo me envolvió y poco a poco comenzó a alejarse de mis nuevos amigos.

No estaba asustado. Era difícil definir mis emociones y sentimientos. Más bien estaba ansioso por saber qué ocurriría.

En mi esfera extraña comenzó a salir una intensa luz que se reflejaba en todos lados. Se alejó de mis nuevos amigos y pude ver con detalles de donde había estado todo ese tiempo.

Era una nave de más de dos kilómetros.  Pero, no se veía con nitidez porque estaba rodeada de un color muy extraño.

Ya muy lejos y muy cerca de Tierra la luz se intensifico más. Al lado derecho salió una ventana. Al lado izquierdo también.

Al lado derecho estaba al parecer mi vida que comenzó a ser resumida. Pude ver cómo había sido mi niñez e incluso pude ver mi muerte. Por tanto, pude asegurarme de que no estaba muerto por ahora. Se cerró esa ventana. Y la ventana izquierda comenzó a emitir imágenes y sonidos muy extraños.

Hasta que se estabilizo. Las imágenes comenzaron después de mi muerte. Y solo duraba un instante. Algo así como quince segundos.

Puse mi mano en la ventana y descubrí que como cualquier video o cámara de video se podía poner pausa, adelantar y retroceder.

Mi impresión no pudo ser más grande. Estaba viendo el fin de la Tierra.

Creo que recién ahí me puse nervioso…

 

 

Continuara….